Wednesday, July 26, 2006


Unos cuerpos son como flores,
otros como puñales,
otros como cintas de agua;
pero todos, temprano o tarde,
serán quemaduras que en otro cuerpo se agranden,
convirtiendo por virtud del fuego a una piedra en un hombre.

Pero el hombre se agita en todas direcciones,
sueña con libertades, compite con el viento,
hasta que un día la quemadura se borra,
volviendo a ser piedra en el camino de nadie.

Yo, que no soy piedra, sino camino
que cruzan al pasar los pies desnudos,
muero de amor por todos ellos;
les doy mi cuerpo para que lo pisen,
aunque les lleve a una ambición o a una nube,
sin que ninguno comprenda
que ambiciones o nubes
no valen un amor que se entrega.
Luis Cernuda de Los placeres prohibidos

5 comments:

Anonymous said...

Hola?

Anonymous said...

ja ja, perdón por mi primer comentario, es que antes comenté 2 veces y no aparecieron. Error. Da que pensar este poema.

Decía que, la autora de Las Horas solía decir que 'a la gente le gusta sentir, sea lo que fuere' ese sentir que a través del amor de otra persona, caminamos por una ilusión o una ambición, pero no por el camino del amor, ése es el camino. Quizá por eso aborrecemos, no valoramos, o no comprendemos, nos perdemos en el camino.

senses and nonsenses said...

para mí, el primer poema hablaba de la idea del amor; este poema me habla del deseo. Y ahí estamos, en el camino, perdiéndonos, buscando, encontrando, y volviéndonos a perder.
autora? No he leído la novela, pero me gustaría leerla. La peli me gustó bastante.

Anonymous said...

Perdón, es que me lié entre Las horas y Virginia wolf, porque ahí dentro sale, pero en definitiva, lo dijo Virginia wolf.

Oscar Mendoza said...

sabes, hace mmmm 5 años estuve en españa, por casualidades les eche la mano a unos niños de bcn para hacer un cortometraje, y se trataba sobre la vida de Luis Cernuda.. aun tengo por ahi el guion, fue una grata experiencia y por lo mismo me interese mucho en el autor